Isaías de la Peña García y Sara Pidal Martínez, del Colegio Corazón de María (Asturias, España), comparten con nosotros como fue participar en la XII edición de Eustory. Son autores del trabajo “De la ley a la ley a través de la figura de D. Torcuato Fernández-Miranda”, tutorizado por Cristina García-Clérigo Sampedro y Marisa Morán Rodríguez, por el que recibieron un accésit.

En esta edición de Eustory se proponía la investigación sobre las transiciones políticas que tuvieron lugar en multitud de países a partir de los años 70. Dichas transiciones partieron desde un régimen totalitario hasta llegar al Estado democrático vigente en la actualidad. Nosotros decidimos centrarnos en la Transición política que atravesó España en la segunda mitad de la década de los 70. Esta elección se debe al desconocimiento de un momento tan importante de la historia de nuestro propio país para los alumnos de 1º de Bachillerato.  

Antes de comenzar el proyecto, sólo sabíamos que había sido una de las transiciones democráticas más pacíficas de la historia. Una vez que aceptamos la propuesta de realizar el proyecto, no sabíamos cómo enfocarlo puesto que en los libros de Historia sólo se muestra la parte más superficial del proceso. No obstante, gracias a nuestras profesoras, descubrimos a una de las figuras más importantes de la Transición, don Torcuato Fernández-Miranda. 

Cuanto más indagábamos en el complejo proceso hacia la democracia, más nos dábamos cuenta de lo fundamental que supuso su labor en la política española, redactando los primeros cimientos sobre los que se construyeron la política de la que gozamos actualmente. Es por eso que sentíamos que debíamos otorgarle el mérito merecido y que se le había arrebatado quedando en un segundo plano. 

Este gijonés, comparado en multitud de ocasiones con el mayor ilustrador español, Jovellanos, fue el propulsor de la Ley de reforma política que hizo posible la impulsión del Estado democrático de nuestro país.  

Poco a poco, fuimos dándole forma a este proyecto, decidiéndonos hacer un documental con los testimonios más vivos y conocedores del interno transcurso. Sin la participación de estas vitales figuras, y solo fijándonos en la información que proporcionaban los libros de texto, nuestro proyecto hubiera sido una mera explicación. Sin embargo, hemos podido adentrarnos en primera persona, a través de sus experiencias y dedicación durante la Transición. Hemos estado trabajando mano a mano con las personas que hicieron posible que ésta fuese una de las más exitosas de la historia. Por ellos, pensamos que, sobre todo las nuevas generaciones como nosotros, debemos tomar conciencia sobre esta parte de la historia, que en ocasiones tendemos a olvidada. 

Teníamos como objetivo vital el dejar constancia de la importancia histórica y la repercusión hasta nuestros días que aquella ley supuso. Debemos estar muy agradecidos de la concordancia de aquellos partícipes que creían en una democracia y de haber hecho de aquel proceso, un país constitucional y tolerante en el que tenemos la suerte de vivir. 

No les vamos a engañar, al principio teníamos muchas dudas e incertidumbres e invertimos muchas horas hablando con nuestras profesoras sobre qué queríamos hacer. Llegamos a la conclusión de que queríamos realizar un documental o cualquier proyecto audiovisual, debido a que, en nuestra opinión, permite explicarnos con mayor facilidad y resulta más ameno e íntimo. 

Después de ordenar nuestras ideas, tuvimos la gran suerte de entrevistar a dos familiares de don Torcuato que nos contaron, de primera mano, cómo vivió él mismo uno de los procesos de mayor importancia en la historia de España y cuya responsabilidad cargó sobre sus hombros:  Juan Fernández-Miranda (su sobrino nieto) y Enrique Fernández-Miranda (su hijo). 

También pudimos entrevistar a Martín Villa, ministro que jugó un papel fundamental en la Transición política. Por último, tuvimos la suerte de entrevistar a Luis Rubio Bardón, presidente del Ateneo Jovellanos de Gijón. 

Gracias a este proyecto hemos podido crecer y evolucionar como personas. Hemos aprendido a valorar todos los derechos y libertades que se nos ofrecen, sin olvidarnos de nuestros deberes y, sobre todo, hemos aprendido cuán complejo y controvertido supuso un proceso que, a priori, bajo nuestra perspectiva, puede parecer un tanto obvio y sencillo. 

Los testimonios vivos han estado presentes en gran parte de este aprendizaje y dejando constancia de que siempre hay algo más sobre aquello que se cuenta o se sabe.  Con este proyecto queremos plasmar todo aquello por lo que estamos agradecidos y todos aquellos aspectos que nos han hecho pararnos a pensar y que llegue al mayor número posible, creando así una cadena de personas comprometidas y conocedoras de su historia.