Francisco Javier Sarabia García, alumno del IES San Fulgencio (Écija), recibió un segundo premio en la XII edición del concurso de historia para jóvenes Eustory. Su proyecto, «36 años después. Historias de una Transición«, fue tutorizado por Ignacio Gómez Gómez. Francisco Javier así mismo fue uno de los alumnos que presentaron su trabajo ganador en la reunión anual de EUSTORY network.

En el proyecto se reflejan diversos testimonios de personas de a pie, que de alguna forma u otra, lograron transformar la nación en el país democrático que conocemos hoy día. Es por ello que se llega a la conclusión de que sería incorrecto hablar de una “Transición”, cuando en realidad se dieron cientos de transiciones paralelas, desde la política nacional, la creación y desarrollo de las autonomías, el cambio en los miles de ayuntamientos hasta las vidas y formas de ser de los millones de ciudadanos de entonces. La España dividida durante 36 años logró ponerse de acuerdo para luchar junta y unida ante las adversidades que estos cambios traían consigo.

Hoy día parece haberse olvidado un periodo tan importante y cercano a la actualidad y que define, de forma directa, nuestra condición como ciudadanos y ciudadanas de un Estado que aún sigue luchando por la igualdad entre hombres y mujeres: un camino que antes del 1975 parecía imposible de emprender.

A través de las páginas se hace notar el desconocimiento de las nuevas generaciones ante todo lo que tenga relación con la Transición y como los jóvenes no son conscientes de que sus familiares más cercanos han sido testigos de uno de los momentos más importantes de la historia reciente del país.

La experiencia al participar en este concurso no podría ser mejor. Consigue hacerte aprender de una forma diferente, recabando información más allá de los meros libros de texto del instituto: escritos de importantes historiadores, prensa y documentos audiovisuales de la época, asistencia a conferencias, etc. Logra, por expresarlo de alguna forma, abrirte los ojos. Te hace valorar tu forma de vivir, el pasado de tu pueblo o ciudad y admirar aún más si cabe a nuestros mayores, que lograron, con su trabajo y esfuerzo, hacer de este un mundo mejor.